miércoles, 29 de abril de 2015

LO QUE IMPLICA SER AFICIONADO A LA LITERATURA PERO TRABAJAR COMO UN BURRO DE CARGA QUE PARADÓJICAMENTE TIENE QUE RESOLVER TODO RÁPIDO

Me da la impresión de que buena parte de los escritores que tienen auténtica vocación son perezosos para todo aquello que no tenga que ver con la escritura, la lectura y la literatura. 

En lo personal, aunque a veces fantaseo con la idea, no soy, ni me considero, un escritor; y más allá de mi afición por los libros, en mi trabajo hago tareas de “burro de carga” en las que no me sirve de nada la “reflexión filosófica”

Muchas veces me siento como Sísifo, ese personaje de  la mitología griega, condenado a subir eternamente una roca cuesta arriba para ver cómo, a poco de llegar a la cima de la montaña, la piedra se me cae a la mierda. 

En la mesa de entradas de Tribunales, lo que predomina es la ansiedad; es decir, la dificultad para esperar. El foro laboral está colapsado, por tanto la mesa se llena de letrados malhumorados a quienes sus clientes les "queman la cabeza", y de peritos que muchas veces no comprenden cómo es posible que el expediente que quieren no está disponible. En demasiadas ocasiones se me vuelve imposible resolver problemas de manera eficaz e inmediata. Ojo, trato de ser un agradecido por tener laburo y obra social, e intento no perder nunca la alegría, aunque a veces se  me hace más difícil que morderme el codo.



Suelo llegar tan cansado a mi casa que me quedan pocas fuerzas para estudiar danés, leer a Nietzsche, mejorar mi pobre alemán o mi pasable inglés. Tuve un compañero que cada tanto me decía: "¿para qué mierda te sirve estudiar danés?", sugiriendo que haga algo útil. Yo no sabía muy bien qué responder, sobre todo porque era una frase que, con sutiles variaciones, me repetía una y otra vez, con lo  cual  yo me sentía en la obligación de ir variando la respuesta, tal vez para no aburrirme, o por capricho de escritor que pretende huir del lugar común, aunque sin éxito. Ah, ¡cierto que dije que no era escritor! Bueno, un poco lo soy, simplemente porque escribo.


En  el entorno laboral donde me muevo diariamente, a la mayoría de las personas no les interesa la literatura, al menos no tanto como me interesa a mí. Una buena parte de quienes me circundan son abogados o estudiantes de derecho. 

“¿Qué tan solitario es el trabajo de un escritor?”, se preguntaba Alejandro Zambra en No leer (Editorial Excursiones), y respondía lo siguiente:


“Recuerdo ese fragmento tan dramático y en cierto modo cómico en que Kafka confiesa el deseo de recluirse en una cueva, solamente con una lámpara y sus materiales de escritura: ‘Me traerían la comida y me la dejarían siempre lejos de donde yo estuviera instalado, detrás de la puerta más exterior de la cueva. Ir a buscarla, en camisón, a través de todas las bóvedas, sería mi único paseo’.

Al escribir nos ausentamos del mundo y a veces pasan días completos en que sólo salimos a comprar cigarros o a pasear al perro (aunque en esos casos es el perro quien nos pasea a nosotros)”. 


A propósito del tema, me gustó mucho -me hizo sentir identificado- un posteo del amigo Martín Zariello, en donde toca el tema de “ser escritor” sin “trabajar de escritor”:


“Cada vez que alguien que sabe que escribo se entera de que trabajo en una lonería, me pregunta: “¿En la administración, no?”. Cuando les digo que no, que no hay tal administración, que reparo lonas, manejo una máquina de soldar, pongo ojales y uso un guardapolvo azul para no ensuciarme la ropa, no lo pueden creer. A nadie le sorprende que un psicoanalista o un abogado escriba en sus ratos libres, eso es lo más natural. Pero puedo asegurar que la idea de que a alguien que trabaja con sus manos (un albañil, un carpintero) se le ocurra escribir se encuentra desterrada de todas las mentes del mundo, por más abiertas y modernas que sean. No los juzgo, yo también tengo el mismo prejuicio. Parece que la escritura es para las personas que tienen una profesión, no un oficio”

El “entorno” laboral de un escritor que no “trabaja de escritor”:


“Hay otro camionero genial que se llama Jacinto, un hombre mayor, con un camión sesentoso y unas lonas viejísimas. Sólo habla de una cosa: su pija. A propósito le preguntamos sobre el clima, sobre el fútbol, sobre la situación política, pero él siempre se las arregla para responder sobre el tamaño de su pija, los días de gloria de su pija, el ocaso de su pija, el efímero renacimiento de su pija gracias al viagra y el nuevo ocaso de su pija cuando su doctor le dijo que si seguía tomando viagra era boleta. Jacinto dice que después de la operación de próstata su pija quedó tan chica que cuando va a orinar a veces se agarra un huevo. Siempre repite ese chiste y siempre se lo festejamos como si estuviésemos delante de Jerry Seinfeld. Jacinto ve el mundo a través de su pija. En eso es más o menos como todos los hombres del mundo”


La división del “trabajo manual” respecto del “trabajo intelectual”. ¿Qué opinaría Karl Marx de este fragmento?


“Trabajar en un lugar donde arde la materialidad empírica (quiera decir esto lo que fuera) te relaja con respecto al mundo del discurso. Algunas personas me transmitieron su asombro por ciertas barbaridades que escribo. Se refieren a textos con carga agresiva que yo escribo en chiste o como autocrítica y el lector toma al pie de la letra como un ataque. Yo no sé qué contestarles pero creo que es porque hay tantas consecuencias reales en mi trabajo que, en comparación, escribir me parece una actividad muy hermosa, pero que carece de sustancia (en el sentido literal de la palabra). Si yo no tapo bien el agujero de una lona rota, por ejemplo, se desencadena una serie de hechos muy desafortunados. En primer lugar, quedo como un boludo ante mis compañeros. En segundo lugar, queda mal la lonería. En tercer lugar, se arruina la mercadería que lleva el camionero. En cuarto lugar, el camionero queda mal con su jefe. En quinto lugar, el jefe queda mal con el dueño de la mercadería. Y en sexto lugar, supongamos que el camionero lleva palta, una fruta o verdura (no sé qué carajo es) que le gusta a la gente moderna. Ok, vos te quedás sin tu palta.

Mi viejo y su socio son dos trabajadores insaciables. Workaholic crónicos e inconscientes, que heredaron esa pulsión por el sacrificio de padres y abuelos, tanos que nunca fueron jóvenes y levantaron los cimientos originales de este país. Me refiero a gente naturalmente sufrida, que jamás tuvo la oportunidad de tirarse en una cama para leer un libro o mirar el techo para comprender que en el techo no hay nada. Y algo de ese pathos quedó incrustado en la vida de estos personajes de entre 50 y 60 años que con el tiempo se convirtieron en nuestros padres. Cuando un cliente les quiere dar consejos sobre un trabajo y encima parece un poco delicado, dicen: “Éste no agarró una pala en su vida”. Me encanta que dividan al mundo entre los que saben hacer un pozo y los que no. Y me gusta porque para mucha gente es al revés: quienes saben manejar una pala son inferiores, los capos son los genios del lenguaje que a través de su originalidad única escriben o piensan desde la torre de marfil. Para mí están equivocados. La Operación es simple: los intelectuales necesitan a los que saben usar una pala, los que saben usar una pala no necesitan a los intelectuales. Si algún día viene el Juicio Final seguramente Dios no va a decir: “Los justos son los que escriben cosas ingeniosas por twitter, los que mencionan que leyeron a Lacan todos los días por las dudas, los que escriben en blogs sobre David Foster Wallace”. Dios va a salvar a los que saben arreglar persianas, a los que usan un alicate con la destreza de un campeón, a los que colocan bisagras o cerámicos, a los que arreglan caños, a los que tapizan sillas, a los que cosen acoplados con el tamaño del Estadio Azteca, a los que sueldan estructuras de hierro sin máscara y bajo la lluvia.

Es que en caso de existir en el cielo sólo debe haber lugar para los tipos que mueven el mundo. No para quienes lo comentamos".

Por supuesto que la realidad es más compleja que la división entre quienes "hacen" y quienes "comentan", pero se trata de una verdad "literaria", aunque con cierta dosis de realidad. A propósito, ¿qué será una dosis de realidad? ¿Dos gotititas, un litro, medio quilo? ¿Se medirá en volumen, en densidad o en peso específico? Vaya uno a saber.


Lo que me gusta de la visión de Martín es que habla de su realidad evitando usar reflejos ajenos supuestamente "prestigiosos". Me explico mejor citando al escritor peruano Juan Ramón Ribeiro, quien dijo que  "de un tiempo a esta parte las novelas francesas son escritas por profesores y para profesores. El novelista francés actual es un señor que no tiene nada que decir sobre el mundo, pero sí mucho sobre la novela" (...) Cada nuevo escritor coteja su obra con la de los escritores anteriores, no con el mundo. De este modo se llega a una rarificación de la materia novelesca, que puede confundirse con el esoterismo". (...) Los nuevos escritores "tratan de hacer de su obra no el reflejo personal de la realidad sino el reflejo personal de otros reflejos".



La crítica

La crítica más interesante siempre o casi siempre surge a partir de la fascinación por aquello que se está criticando. Por eso los críticos rigurosos -en el mejor de los casos- y que por ese motivo son fieles a su responsabilidad profesional, con lo cual deben leer hasta dos veces novelas o libros -o películas o discos- que muchas veces les parecen aburridas, solamente para "parar la olla", suelen esforzarse por dejar ver una cierta arbitrariedad que indique de forma perceptible que ellos no disfrutan "esa" literatura o "ese" disco o "esa" película a la que están obligados a hacer referencia. El amigo Zambra ha dicho que al dejar la crítica literaria sintió el placer de NO LEER algunos libros. Las críticas de Walter Benjamin a Kafka o Proust, lo que Juan Forn opina de García Márquez o lo que Giorgio Colli dice sobre Nietzsche, por poner ejemplos al azar, son textos que vale la pena leer, porque han sido escritos por autores "fascinados" y no "indiferentes" o "burocratizados".

Creo que hoy dije más o menos lo que tenía ganas de decir. Afuera llueve, hace frío y yo estoy con anginas. Menos mal que mañana es el último día de la semana que voy al laburo.

A todo esto, ¿qué estará haciendo Prometeo en este momento? ¿Se lo habrá tragado Sísifo?

martes, 28 de abril de 2015

MI CANDIDATURA AL PREMIO NOBEL

El Premio Nobel de Lectura me lo tendrían que dar a mí, que soy el lector ideal y leo todo lo que encuentro: leo los nombres de las calles, los subtítulos de las películas, los letreros luminosos y las inscripciones de los baños. Leo las noticias de fútbol y los estados del facebook. Y sobre todo leo, y disfruto mucho haciéndolo, a Don Nicanor Parra, que es un poeta chileno.

viernes, 24 de abril de 2015

ESTIMADOS DUEÑOS DE LAS REDES SOCIALES: QUIERO DECIRLES QUE LES DOY PERMISO

Le doy mi total consentimiento a Mark Zuckerberg, a sus amigos, a la CIA, al elenco entero de Homeland, a Telefónica, a la SIDE, a Al Qaeda y a cualquier agencia gubernamental cuyos miembros estén absolutamente al pedo y mentalmente desocupados, por si les pinta pispear las pelotudeces que haya puesto en mi muro, filtrar las gansadas de mi cuenta de Gmail, leer las innumerables giladas que pongo en este blog o mirar las poquísimas fotos que adornan mi perfil, dado que mi privacidad quedó total y absolutamente mansillada desde el día en que se me ocurrió crearme una cuenta en Facebook o usar las redes sociales. Si da la maldita casualidad que alguien me roba una idea y hace guita con eso, cosa que dudo porque a mí jamás se me ocurrió algo ni tan siquiera mínimamente rentable, le ruego por favor que no sea tacaño y, no te digo un asado con postre, pero aunque más no sea me invite una cerveza con papas fritas. Si tenés ganas de cortar y pegar esto en tu muro, no seré yo quien te lo impida. De todas maneras me parece que sería bueno que tuvieras mejores cosas que hacer que andar cortando y pegando gansadas, ¿no te parece?

jueves, 23 de abril de 2015

EL DÍA EN QUE LEONARDO DA VINCI PREFIGURÓ UN SKETCH DE PETER CAPUSOTTO

Parece ser que Leonardo da Vinci, poco después de llegar a Milán, se hizo cargo de la cocina de una famosa taberna ubicada junto al Ponte Vecchio, llamada “Los Tres Caracoles”. Como estaba asqueado de las fuentes rebosantes de polenta servida con trozos de carne enormes e irreconocibles, desperdigadas al tuntún en el resto del plato, se propuso civilizar la "especialidad de la casa" para que se ajuste al espíritu renacentista, y cuando los comensales recibieron las diminutas porciones de exquisitas carnes servidas en diminutos trozos de polenta tallada, irrumpieron furiosos en la cocina queriendo cagar a trompadas al cocinero. Esto nos recuerda al restaurant “Uy, nos rompieron el orto”, ubicado en cualquier lugar de Palermo: un lugar donde un bife a caballo se llama "huevo con consumación de fritez en aceite en hervor sobre soporte de lonja tronchada de vacuno". 

Entre sus numerosas invenciones -según nos recuerda Juan Forn en La tierra elegida- Don Leonardo también ideó el popular sándwich: 

"La rebanada de carrillo de buey debe ir entre sendos pedazos de pan y no al revés. Será un plato como no se ha visto nunca en la mesa de mi señor Ludovico Sforza. En verdad, se podría disponer toda suerte de cosas entre los panes: ubres, testículos, orejas, rabos, hígados. Los comensales no podrán ver el contenido al atacarlo con sus cuchillos. Lo llamaré, por eso, 'pan con sorpresa´".

domingo, 19 de abril de 2015

FRAGMENTO CLANDESTINO DEL DIARIO ÍNTIMO DE LILITA CARRIÓ QUE PODRÍA HABER SIDO ESCRITO POR CÉSAR AIRA PERO EN REALIDAD NO

Fulminada por el último resultado electoral, le mandé un mensaje de texto a mi sucesor y le dije que salga a dar la cara por mí, porque “estoy abatida”. Apagué todos los teléfonos, me hice un tilo y me acosté a dormir. El sonido incesante del timbre me liberó del influjo de la "yegua nocturna": "¡qué sueño asqueroso!, ¿y quién carajo puede ser a esta hora?"

La voz que venía del portero eléctrico me tranquilizó: era el Tano Pacman...

Una mezcla de ansiedad y excitación comenzó a hervirme la sangre.

El placer es como el nacimiento o como la muerte, nos ocurre una sola vez, pero al nacimiento lo olvidamos y a la muerte la ignoramos: el placer es ese único instante de éxtasis cuyo recuerdo o ilusión nos mantiene vivos. El resto de la existencia, antes y después, es tan sólo una reflexión al respecto.

Tal vez suene ridículo, pero es así: creemos amar a una sola persona, pero de hecho solamente amamos una chispa en el ápice vertiginoso del tiempo...

Ni bien abrí la puerta, el Tano- sabiendo que estábamos los dos solos- me tomó con ambos brazos y me tiró contra el sillón: de un salto se abalanzó contra mí y me besó los labios con fuerza. Después se fue a la cocina, agarró un frasco y me untó con miel de la cabeza a los pies. Empezó a frotarme el cuerpo haciendo círculos amplios con ambas manos, como Laruso en Karate Kid cuando el señor Miyagui le ordena lustrar los autos. Me pegó un cachetazo:

-"¡¡Gritá Viva Perón hija de puta!! ¡¡Gritá!!"

Yo estaba absolutamente fuera de mí: el placer apenas me cabía en el cuerpo. El Tano despanzurró un almohadón y me cubrió de plumas, que quedaron pegadas a la miel.

- "¡Hacé que sos una gallina! ¡Gritá Jota Jota López! ¡Gritá Aguilar, gritá Aguilar la concha de tu madre! ¡Gritá carajo, dále!... "

Me sentí completamente esclavizada por la lujuria.


- "Bueno, bueno, ya está, basta. ¡¡Ahora cacareá!! ¡¡Hacé que ponés huevos!!"

Como poseída por el espíritu de Labruna y Almeyda, empecé a cacarear a todo volumen, como una gallina a la que un gallo bataraz le picotea la cresta.

- "Ahora decí: ¡pongan huevos, esto es River, pongan huevos! ¿Dónde mierda se creen que están?"

Yo le hacía caso en todo, pese a que el fútbol me parece un deporte de ignaros: prefiero jugar al buraco, y más con el Tano. Cuando ya casi me estaba por quedar sin aire, el Tano me agarró de las mechas y me llevó hasta el baño. A puntapiés me sentó en el inodoro y me apretó la cabeza contra mis propias rodillas. Después me obligó a tomar una ducha fría mientras me daba latigazos en la espalda con su propio cinturón.

Hicimos el amor, nos quedamos dormidos y a la mañana siguiente le llamé un taxi para que se fuera. Me dijo que era la última vez que nos íbamos a ver, que era un hombre casado y que no tenía ganas de poner en riesgo su matrimonio. Se me hizo un nudo en el pecho y no supe bien qué decir. Lo despedí con un beso seco y desganado en la mejilla.


Ni bien se fue prendí la tele, pero tuve que apagarla enseguida. Me tiré boca abajo en la cama, puse la cabeza entre dos almohadones blancos y me largué a llorar hasta quedarme sin lágrimas.

ACERCA DE EDUARDO GALEANO

“Quemen la discoteca/ cuelguen al bendito DJ/ porque la música que pasan constantemente/ no me dice nada respecto de mi vida” (“burn down the disco/ hang the blessed DJ/ because the music that they constantly play/ it says nothing to me about my life”), cantaba Morrisey en "Panic", hace ya varios años.

Eduardo Galeano (1940-2015) escribía sencillo, con un estilo incluso un poco sentimental e ingenuo, pero sus libros SÍ nos hablaban -nos hablan- de cuestiones vitales que uno sentía cuando era adolescente, y que sigue sintiendo a pesar del paso del tiempo. Está claro que la realidad es más compleja que todo lo que Galeano haya podido decir de ella. Es cierto que en sus obras, Don Eduardo padecía de cierta tendencia al binarismo maniqueo, pero hoy no tengo ganas de escribir un texto "crítico" sino más bien "sentimental".


A mí me han gustado muchas chicas lindas que gustaban de su literatura, con lo cual uno le envidiaba su capacidad de enamorar a esas bellezas con pinta de estudiantes de filosofía o ciencias sociales vestidas con onda hippona, que escuchaban a Caetano o leían a Foucault, y que se conmovían con ese uruguayo “sentipensante”. Me hubiese gustado gustarles como les gustaba él.


Objetarle que escribía “libros para adolescentes” supone, como dice Marcelo Figueras por ahí, “ningunear a la adolescencia antes que a Galeano, cuando se trata de nuestro momento de mayor curiosidad y apertura. Es verdad que en el apetito pantagruélico de esos años, uno lee mucha mierda. Pero el tiempo pone ciertas cosas en su lugar”

Está lleno de escritores que, como decía Nietzsche, “enturbian las aguas para hacerlas parecer profundas”. Escribir en estilo barroco y complicado es, casi siempre, más fácil que escribir sencillo. Hay un arte de parecer sin arte que Galeano cultivaba muy bien. Hay cierta oralidad en su estilo que uno disfrutaba, porque no es menor la capacidad de tocar temas trascendentes sin caer en el cliché, y  en sus mejores momentos el yorugua lo lograba. Ojo, tampoco hay necesidad de ser dogmáticos: hay autores que escriben "en complicado" y no por eso dejan de maravillarme.

Leer sólo los libros de Galeano es empobrecedor, como es empobrecedor seguir una dieta exclusiva de vitaminas o de hidratos de carbono o ir al cine solamente para mirar películas de suspenso. A otro escritor, también uruguayo y también fallecido recientemente, Gustavo Escanlar (1962-2010), le gustaba provocar y burlarse de los “mitos uruguayos”: Benedetti, Galeano o la supuesta humildad de sus compatriotas. 

A mi juicio, hay obras de Escanlar que valen la pena, y me parece bien que uno pueda leer autores que contradigan la fascinación de otros autores. Pero hoy no quiero hablar de Escanlar sino de Eduardo Galeano. Le pedimos a la literatura que nos entretenga pero también que nos conmueva, que nos ilumine, que nos interpele, que nos exprese, que nos seduzca, que nos trastorne, que nos deje huella: que aumente nuestra experiencia vital. A mí me parece que Galeano fue capaz de eso, y que “eso” no es poco.

En este link Don Abel Fernández, autor de un blog siempre interesante de leer -tanto por el contenido y el tratamiento que le da a cada uno de sus posteos como por la lucidez de algunos de sus comentaristas- evocaba la muerte del escritor uruguayo.

martes, 7 de abril de 2015

CUANDO LA INCONTINENCIA VERBAL DE FERNANDO SAVATER LO LLEVA A DECIR BURRADAS

En un posteo anterior hablábamos de los "fast thinkers", y decíamos que muchas veces al filósofo español Fernando Savater le cabe muy bien esa definición: su incontinencia verbal y cierta arrogancia lo llevan a opinar de cualquier cosa, con lo cual muchas veces dice burradas importantes sin ninguna o con muy poca rigurosidad empírica o histórica. 

La caracterización que el autor de Ética para Amador hace del "populismo" como "la democracia de los ignorantes" es realmente pobre. ¿O acaso George Bush, Mauricio Macri, Ronald Reagan y tantos otros líderes anti-populistas son y han sido mucho más cultos y lúcidos que varios líderes "populistas"? ¿O acaso quienes votaron a Bush son políticamente menos brutos que quienes votaron a Rafael Correa en Ecuador? Yo me permitiría, al menos, ponerlo en duda. Es más: creo que afirmar algo semejante, o su contrario, es filosóficamente una estupidez.

Su caracterización del movimiento Podemos me parece realmente muy endeble y conservadora. Se entiende el motivo por el cual es amigo de Mario Vargas Llosa... Es más, varias de sus ideas políticas padecen de cierto "vargallosismo pocket", combinado con un desprecio a la historia de América latina y un eurocentrismo apenas disimulado.

En este link se puede leer un análisis del "populismo" bastante más interesante que la pavada expresada en varios foros por parte del amigo Fernando. No estoy diciendo que el populismo sea la panacea, sino que caracterizarlo como "la democracia de los ignorantes" es conceptualmente muy burdo.

Es como si yo dijera que el liberalismo es "la democracia de los imperialistas", o alguna barrabasada semejante. El liberalismo, al igual que el populismo, no se deja etiquetar en tres palabras. El mismo Savater gusta de citar a Nietzsche diciendo que "sólo los seres ahistóricos admiten una definición exacta". Creo que a Savater le vendría bien revisar otra vez la frase de Nietzsche que tanto gusta mencionar.

No niego que Savater es un tipo lúcido, sino que muchas veces dice pelotudeces demasiado gruesas.

Acá tienen un link con un debate acerca del "populismo" de algunos integrantes de Podemos. Podrán estar de acuerdo o no con ese debate, pero para mí no se trata de un conjunto de ignorantes ni de bobos, sino de personas apasionadas por las ideas que argumentan muy bien, más allá del acuerdo o desacuerdo que cada uno pueda tener con sus respectivas posturas políticas.

¡Sean felices!

domingo, 5 de abril de 2015

LA DEMOCRACIA Y LOS OTROS SEGÚN ÁLVARO GARCÍA LINERA

"¿Qué está pasando en América latina, que de manera sincera podemos hablar, comunicar, informar a Europa? No se trata de imitar moldes, ningún pueblo es parecido al otro, ninguna experiencia histórica es parecida a otra, no hay una ruta, no hay una fórmula que todos debemos imitar. Lo que hay son experiencias compartidas. Situaciones que enriquecen la experiencia del otro. Experiencia del otro que mejora la comprensión de nuestra propia experiencia. (...) 

Lo nuevo de América Latina, y creo que lo nuevo del florecimiento de la democracia radica no en la negación de los procesos de democracia representativa -el pueblo vota, la gente va a votar y forma parte de su hábito-. Quizá lo nuevo que está enseñando América Latina,que está mostrando es que la democracia no se puede reducir únicamente al voto.Que el voto, la representación, es un elemento fundamental de la constitución democrática de los Estados. Se garantizan derechos, se garantiza pluralidad (...) 

La democracia de la calle, la democracia de la plaza, la democracia del sindicato, la democracia de la gente reunida para deliberar sus asuntos, para protestar, para marchar, para posesionar, para defender, para apoyar, es la única manera en que las democracias contemporáneas pueden salir de lo que hemos denominado esta "vivencia fósil" de la experiencia democrática. Hoy en muchos países del mundo tienen sistemas electorales, claro que sí. Tienen sistemas democráticos, claro que sí. Pero son democracias fósiles. Sus ciudadanos apáticos, recluidos en sus casas con la mantequilla y el pan suficiente para el día, ¿en qué intervienen? ¿Qué deciden? ¿Deciden el destino de su barrio? ¿Deciden el destino de su departamento? ¿Deciden el destino de su país? ¿Deciden los despidos? ¿Deciden las inversiones? ¿Deciden el crecimiento de la economía? ¿Deciden la asignación presupuestaria para la salud y la educación? No lo hacen. Lo hace una minoría, una élite, una casta. ¿Quién va a defender la revolución en Venezuela? La gente, el humilde, el trabajador, la vendedora, el comerciante. En la calle, en el barrio, en la comunidad. ¿Quién defendió al presidente Evo cuando nos cercaban, cuando había golpe de Estado, cuando había grupos de mercenarios dispuestos a matarnos en cada lugar donde aterrizábamos? La gente. Esta democracia plebeya. Esta democracia de la calle que garantiza un nuevo tipo de gobernabilidad. (...) La democracia de los sindicatos. La democracia de los hombres y mujeres afectados por las políticas de austeridad y que se sienten convocados a construir un destino común saliendo a la calle, reuniéndose con los vecinos, reuniéndose con los compañeros, creando otro tipo de sociabilidad, otro tipo de comunidad en marcha (...)"

Este fragmento forma parte de un discurso en el Foro Internacional Emancipación e Igualdad del Vicepresidente de Bolivia -y también matemático y sociólogo- Álvaro Garía Linera. Me pareció una buena síntesis para motivar la reflexión.

jueves, 2 de abril de 2015

ME AGRADA LA PROPUESTA DEL TATA MARTINO EN LA SELECCIÓN

Acabo de leer esta nota de Fernando Pacini, y mayormente comparto su visión. Para poder implementar su manera de ver el fútbol, Martino deberá "lidiar con el mensaje de cautela y temor que domina al medio y con el pánico de relatores y comentaristas cuando se toca cerca del área".

Como bien dice Pacini, "confrontar con esa cultura del miedo es mucho más difícil que darle un pase atrás a Guzmán".

Si vos rifás la pelota, las probabilidades de que la obtenga el rival son cercanas al 50%, mientras que si vos arriesgás, te la pueden quitar cerca del área, pero serán mayores las chances de lastimar que de salir lastimado. Entiendo que la cosa se complica si vos armás un equipo lleno de "picapiedras", pero me parece que en la selección hay jugadores de muy buen pie: Pastore, Tevez, Banega, Biglia, Musacchio, en menor medida Mascherano, Di María, Lamela, ni hablar de Messi, Higuaín, Aguero...

Todos sabemos que en el fútbol de hoy es más sencillo esperar con las líneas bien agrupadas atrás y salir rápido de contra, o apostar a la popular "pelota parada"; que preparar el equipo para jugar como el Tata Martino pretende. La manera de jugar del actual técnico argentino lleva tiempo: se necesita salida clara desde el fondo, movilidad, presión colectiva cuando se pierde la pelota, precisión en velocidad, etc. No es tarea fácil funcionar como un "resorte" que se expande o agrupa según las circunstancias del juego. Sea como fuere, me parece que si los jugadores logran convencerse de que con ese estilo se pueden lograr resultados, y la suerte ayuda un poco, la selección argentina puede mostrar largos pasajes de muy buen fútbol. 

Es esperable que hasta el momento no se haya consolidado el funcionamiento, salvo algunos pasajes contra Portugal, el inicio del partido en la derrota contra Brasil o el segundo tiempo de la victoria contra Ecuador.

Me gusta la propuesta de progresar triangulando, de abrir la cancha a partir de la subida de los laterales, y también me agrada que le haya dado cierta continuidad a Javier Pastore.

En este link, el ex lateral derecho de River y actual periodista, Gustavo Lombardi, analiza algunos aspectos del Newell's que dirigía el Tata.

Si me apostaran mil pesos a que la selección logrará consagrarse campeón de la próxima Copa América o no, apostaría por el no. El motivo es muy sencillo: salir campeón es la excepción, no la regla. Sin embargo, y más allá de ansiedades y miedos "resultadistas", creo que con  el tiempo, este equipo me dará varias alegrías.

La formación titular será muy similar a la siguiente: Romero; Zabaleta, Garay, Otamendi, Rojo; Biglia, Mascherano, Di María; Pastore; Messi e Higuaín.

Luego de la Copa habrá que ver cómo se van incorporando los Lucas Ocampo, Ángel Correa, Kranevitter, Dybala, Cubas, Icardi... Mucha gente quiere, a mi juicio erróneamente, que Martino llene el equipo de "pibes" pensando en el mundial. Para mí el objetivo inmediato no es el mundial, sino la Copa América y las eliminatorias.

Por mi parte, dejaría de convocar a Gago y a Demichelis, pero con el resto de los convocados estoy más o menos de acuerdo, más allá de la ansiedad por ver a players como Dybala o Icardi. Tampoco me termina de convencer Carlitos Tevez, aunque me parece un gran jugador.


¿Cuál creo que será la lista de la Copa América de Chile 2015? Arriesgo una hipótesis con un margen de error, salvo lesionados, de +- cuatro players:

Arqueros (3): Romero, Guzmán y Rulli.

Defensores (7): Zabaleta, Garay, Otamendi, Rojo, Roncaglia, De Michelis, Musacchio.

Mediocampistas (8): Biglia, Mascherano, Di María, Pastore, R. Pereyra, Enzo Pérez, Maxi Rodríguez, Banega.

Delanteros (5): Lavezzi, Tevez, Aguero, Messi e Higuaín.